¿Sientes que das lo mejor de ti en cada entrevista, pero nunca recibes una respuesta positiva? ¿Escuchas frases como “gracias por participar, pero hemos elegido a otro candidato” y ya ni sabes qué estás haciendo mal? Tranquilo, no estás solo. Muchos profesionales con talento están enfrentando lo mismo.
En este artículo te contamos las razones más comunes por las que podrías estar siendo descartado en entrevistas de trabajo, y lo más importante: cómo solucionarlo para aumentar tus posibilidades de conseguir el empleo que mereces.
1. No investigaste sobre la empresa
Uno de los errores más comunes es no conocer a fondo a la empresa donde estás aplicando. Si no sabes a qué se dedican o cuáles son sus valores, el reclutador lo notará de inmediato.
¿Qué hacer? Antes de cada entrevista, visita su sitio web, redes sociales y busca noticias recientes. Conoce su giro, misión y proyectos actuales.
2. Tu lenguaje corporal te está saboteando
Aunque no lo notes, tus gestos comunican mucho. Evitar el contacto visual, cruzar los brazos o moverte nerviosamente pueden proyectar inseguridad o desinterés.
¿Qué hacer? Practica frente al espejo o graba simulaciones. Mantén una postura abierta, sonríe y haz contacto visual natural.
3. Tu currículum no refleja tus logros
Si tu CV solo dice “responsable de ventas” pero no menciona resultados, es probable que pases desapercibidos.
¿Qué hacer? Usa frases de impacto como “aumenté las ventas un 25% en 6 meses” o “reduje el tiempo de atención al cliente en un 30%”. ¡Los números hablan!
4. Llegaste tarde (aunque sea por 5 minutos)
La puntualidad es una de las primeras pruebas de compromiso. Si llegas justo o tarde, generas una mala primera impresión.
¿Qué hacer? Planea llegar 10-15 minutos antes. Si es virtual, asegúrate de tener buena conexión y tu equipo listo.
5. No mostraste entusiasmo por el puesto
Responder con frases cortas o sin emoción puede parecer que no te interesa realmente el trabajo.
¿Qué hacer? Haz preguntas sobre el puesto, la empresa y el equipo. Muestra interés genuino.
6. No comunicas bien tus habilidades o experiencia
A veces no es que no tengas experiencia, sino que no sabes venderla bien. Responder con “no sé” o “no lo he hecho nunca” puede jugar en tu contra, incluso si eres capaz de aprender.
¿Qué hacer? Usa ejemplos concretos de tu experiencia, incluso si son de trabajos similares o voluntariado. Destaca tu actitud y disposición a aprender.
7. No supiste responder las preguntas difíciles
Preguntas como “¿por qué dejaste tu último empleo?” o “¿cuál es tu mayor debilidad?” pueden tumbar tu entrevista si no estás preparado.
¿Qué hacer? Prepara respuestas honestas pero positivas. Por ejemplo: “Mi anterior empleo ya no me permitía crecer profesionalmente, y busco un nuevo reto.”
Bonus: El error silencioso – Ghostear al reclutador
Si no contestas llamadas, mensajes o correos después de una entrevista, aunque creas que ya no te interesa el puesto, eso puede cerrarte puertas para futuras oportunidades.
Conclusión
Ser descartado en entrevistas no significa que no seas bueno, significa que algo puede mejorarse. Con pequeños ajustes en tu preparación, actitud y comunicación, puedes dar ese salto que necesitas para conseguir el trabajo que mereces.
¿Buscas trabajo?En ProStaff Solutions te conectamos con las mejores empresas. Te apoyamos con procesos de selección confiables, orientación profesional y oportunidades reales.
Revisa nuestras vacantes activas o envíanos tu CV para considerarte en futuros procesos.